Santa Claus ya estaba harto. Tanto viaje arriba y abajo, de casa en casa, tanto rellenar sacos de regalos, tanto niño, tanto gritar JOJOJOJO una y otra vez (cuando él tenía una preciosa voz de pito), tanto arrear a sus queridos renos, tanto pasar frío durante las gélidas noches navideñas, tanto monta monta tanto…
Además, los renos ya estaban achacosos, y cada vez tardaban más en hacer el recorrido habitual, con lo que se podía correr el riesgo de que la noche de Navidad durara más noches. Él mismo también se notaba cansado, le empezaba a afectar la artrosis, la mixomatosis e incluso la triquinosis, y se daba cuenta de que no estaba ya para muchas florituras.
Le apetecía tanto salir de su rutina…
Así que se plantó a la autoridad pertinente (que nunca he sabido quién es) y presentó su dimisión irrevocable. No hubo manera de hacerle cambiar de opinión, por mucho empeño que le puso su jefe.
Y se marchó a su querido hogar.
Claus (ahora ya sin Santa), de jovencillo, siempre había querido montar un grupo de rock. Había tomado clases de canto, y no se le daba nada mal. Los renos, asimismo, para matar el tiempo mientras llegaban las navidades, aprovecharon para aprender a tocar un instrumento.
Así fue como nació Ex-Father Noël & The Wild Renos, que arrasó allende los mares con su primer trabajo: “Mecagüen los Reyes Magos”.
Al año siguiente los niños tuvieron que apañarse con los juguetes de la navidad anterior (casi todos rotos, por cierto) y hubo lloros y pataletas a punta pala, pero esa es otra historia…
Además, los renos ya estaban achacosos, y cada vez tardaban más en hacer el recorrido habitual, con lo que se podía correr el riesgo de que la noche de Navidad durara más noches. Él mismo también se notaba cansado, le empezaba a afectar la artrosis, la mixomatosis e incluso la triquinosis, y se daba cuenta de que no estaba ya para muchas florituras.
Le apetecía tanto salir de su rutina…
Así que se plantó a la autoridad pertinente (que nunca he sabido quién es) y presentó su dimisión irrevocable. No hubo manera de hacerle cambiar de opinión, por mucho empeño que le puso su jefe.
Y se marchó a su querido hogar.
Claus (ahora ya sin Santa), de jovencillo, siempre había querido montar un grupo de rock. Había tomado clases de canto, y no se le daba nada mal. Los renos, asimismo, para matar el tiempo mientras llegaban las navidades, aprovecharon para aprender a tocar un instrumento.
Así fue como nació Ex-Father Noël & The Wild Renos, que arrasó allende los mares con su primer trabajo: “Mecagüen los Reyes Magos”.
Al año siguiente los niños tuvieron que apañarse con los juguetes de la navidad anterior (casi todos rotos, por cierto) y hubo lloros y pataletas a punta pala, pero esa es otra historia…
BON NADAL A TOTHOM!

Ex-Father Noël & The Wild Renos, en plena actuación en el Royal Albert Hall.