dimecres, 5 de novembre del 2008

JUEGOS


Suelo leer todo periódico que pasa ante mis narices, aparte de comprar el mío propio, cosa que, como no tiro nada, al cabo de unos días tengo overbooking de papel. Si tuviera chimenea me irían de perlas, pero como no es el caso (qué pena), pues voy haciendo slalom, esquivando los diferentes montones de diarios que voy dejando por casa. Tendré síndrome de Diógenes?
Vaya, ya me estoy dispersando, para variar.
Sigo.
Las noticias las miro así por encima, total, en todas partes hablan y dicen lo mismo. Me detengo, sobretodo, a leer los artículos de opinión.
Javier Ortiz, Josep Pernau, Maruja Torres, Josep Mª Espinàs, Baltasar Porcel, Isabel-Clara Simó, Iu Forn, Rafael Reig, Quim Monzó (al que últimamente no sé qué le pasa, está raro), Sergi Pàmies… y Màrius Serra. Y alguno más que me dejo, claro.
M. Serra es muy divertido.
Juega.

Verbalia.com. El país de los herbívoros. Màrius Serra i Roig (Barcelona, 1963) se toma la vida con Filología, desde antes incluso de licenciarse en la Universidad de Barcelona en la modalidad (o disciplina) Inglesa. Màrius Serra, fundador de Verbalia, Rafael Hidalgo y Beatrice Parisi, gobiernan de modo un tanto anárquico el pais de los verbívoros, y son los principales irresponsables de propagar la epidemia, porque promueven el uso y abuso de las lenguas sin tomar ningún tipo de medidas. Por separado son peligrosos, y juntos ni se sabe, porque no se pueden ni ver (están muy atareados).

Juega con las palabras.

En su artículo del lunes, habla de una invitación que recibió para asistir a una conferencia que daba Joan Puigcercós, “Una mirada republicana als valors”:

No asistí (…) Recibí un correo de un lector que me incitaba a buscar dónde había pronunciado la conferencia. Lo miré: en el Auditori ONCE de Barcelona. La conclusión de mi corresponsa era clara: ir a definir la “mirada” republicana en el auditorio nacional de “ciegos” es, cuanto menos, chocante” (…) A mí, la presunta paradoja de la mirada de Puigcercós me recordó una comparecencia de la consellera Montserrat Tura cuando dirigía el Departament d’Interior. La consellera presentó un plan para intentar que los accidentes disminuyeran y lo llamó, como quien no quiere la cosa, “pla de xoc”.

Luego, ya se va soltando:

También oí a una líder feminista declarar, en un contexto que aludía a la discriminación laboral de la mujer cuando estaba embarazada:”les dones no hem estat mai compreses”. La perversidad del lenguaje es una constante.

Quizás lo que más me atraiga sea que, aprovechando los juegos, cuenta anécdotas. Más adelante habla de un caso en que una pareja que se había comprado un piso que estaba afectado y a punto de demoler:

Lo sarcástico del triste caso es que el piso en cuestión estaba sito en la calle Passerell (pardillo, en castellano).

Otra. Siempre va a comprar petardos, cuando llega la verbena de Sant Joan, a la misma caseta:

Como voy sólo una vez al año, me costaría mucho más orientarme si no fuera porque recuerdo bien el nombre de la calle: Perill (peligro). En Girona, en cambio, en la calle Perill no venden petardos, pero sí productos relacionados con el cannabis en una tienda de nombre muy vegetal: Dr. Cogollo.

Bueno, sobre esto último, personalmente, no veo peligro al tema del cannabis. En todo caso, y siguiendo con el juego de palabras, al hecho de fumar petardos.

Y la última:

El lingüista Lluís de Yzaguirre me recordaba como una de las primeras clínicas que practicaron abortos en Barcelona estaba sita en la calle Cardenal Vives i Tutó, tres nombres que chocaban por motivos obvios con dichas prácticas.

A esto, entre otras muchas cosas, supongo, se dedica este hombre. Envidia sana, me da.

Qué bien se lo pasa, verdad?